Un vecino de la vecina localidad encontró el dispositivo en estado de corrosión y dio aviso a la Policía que confirmó que carece de carga explosiva. De qué se trata y por qué apareció en ese lugar.
Un habitante de Granadero Baigorria cavaba un pozo en el jardín de su casa cuando divisó un proyectil enterrado que resultó ser original de la Primera Guerra Mundial. El dispositivo, que estaba en estado de deterioro extremo, fue examinado por personal policial que determinó que carece de material explosivo.
El vecino, quien vive en calle Caning al 1000 de la vecina localidad, llamó al 911 al divisar el objeto e inmediatamente intervino la división de Neutralización de explosivos que verificaron que se trataba de un proyectil de artillería terrestre de 75 milímetros, presumiblemente del modelo Shrnapel, en avanzado estado de corrosión debido a que se encontraba enterrado.
De acuerdo a lo que confirmó Georgina Wilke, jefa de la división en diálogo con De 12 a 14 (El Tres), “es un material muy antiguo, un proyectil de la primera Guerra Mundial corroído, en un estado avanzado de deterioro, que carece totalmente de carga explosiva. No estaba enterrado muy profundo, pero lo suficiente como para que se corroa”.
Sobre el origen, advirtió que “en la zona era común que se hicieran prácticas por la fábrica Fray Luis Beltrán y en la vera hemos encontrado material de ejercicio”. También consideró que mucha gente guarda este tipo de explosivos de recuerdo y en algún momento se deshace de ellos y los arroja.
Por último, confió que solicitaron a la Fiscalía, una vez que concluya la investigación, les permita utilizarlo para tareas de instrucción.
Fuente: SFA/R3