La fobia es uno de los trastornos que más preocupan a las personas. La sensación de un miedo intenso, persistente y hasta desproporcionado, atemoriza a propios y extraños.
Dentro de este terreno, del cual se ocupan psicólogos, psiquiátricas, médicos, entre otros profesionales de la salud mental, existe la omfalofobia. Al ser un término poco mencionado y reconocido, los pacientes se preguntan qué es.
Según portales de medicina, la omfalofobia es el miedo irracional a ver, o tocar, tu propio ombligo o el de otra persona. Esta fobia es una de las menos conocidas, pero genera en los seres humanos una sensación completamente extraña que roza el pudor.
Aunque parezca difícil de imaginar y hasta de sentir, la omfalofobia genera fuertes ataques de ansiedad y de pánico ante la inminente posibilidad de observar esta parte del cuerpo, ubicada en la zona del estómago. Tal profundo es el trastorno que estas personas prefieren evitar lugares como piletas o playas, donde se deja al descubierto esta cicatriz redonda.
Como cualquier enfermedad o alteración del organismo, existe un origen que lleva a la persona a acrecentar el problema. Desde algún trauma familiar, episodios pasados de ansiedad o estrés, entre otros, pueden afectar la psiquis del paciente, que atraviesa esta fobia como un problema social y evita el contacto con entornos que no son de su confianza.
Entre los síntomas asociados a la omfalofobia están la ansiedad, pánico excesivo, náuseas, malestar físico, sudoración, palpitaciones y excesiva preocupación por no ver torsos desnudos donde se observe el ombligo.
Por otra parte, los expertos indicaron que las personas con este tipo de fobia padecen una “hipersensibilidad corporal” que las hace sentir incómodas con su propio cuerpo, exteriorizando esta molestia.
Además de la omfalofobia, las personas experimentan otros tipos de miedos -irracionales o no- que ponen en jaque su salud mental y deciden recurrir a psicólogos. Estos son los seis trastornos que pueden afectar tu día a día.
1) Xantofobia
La xantofobia es el miedo extremo al color amarillo. El primer síntoma que se experimenta al ver este color es de ansiedad y estrés desmedido. Para conocer el origen hay que remontarse a experiencias pasadas o alguna asociación negativa con el color.
2) Turofobia
Es uno de los trastornos más curiosos porque está asociado a uno de los alimentos más requeridos y solicitados por las personas: el queso. Esta fobia puede tener su origen en una experiencia desagradable con el queso, como una ingesta en mal estado que generó un dolor estomacal o gastroenteritis. También puede asociarse a su textura y aroma.
3) Pogonofobia
Es el miedo irracional a las barbas. Es una de las fobias más peligrosas porque la mayoría de los hombres dejan crecer el pelo en su rostro. Una de las principales consecuencias es que afecta la vida social del ser humano que la padece.
4) Catisofobia
Es la fobia a sentarse. Este trastorno, por demás inusual, se experimenta cuando uno se recuesta sobre una silla o sillón. Es uno de los más complicados de resolver porque atenta contra la sociabilización de una persona.
5) Hipopotomonstrosesquipedaliofobia
Como indica el nombre del trastorno, es la fobia a las palabras largas. Esta fobia puede provocar ansiedad intensa en las personas que la padecen, sobre todo, cuando deben enfrentarse a términos complejos en la lectura o el habla.
6) Eisoptrofobia
Es el miedo irracional a mirarse al espejo. Quienes padecen esta fobia suelen evitar cualquier superficie que pueda reflejar su imagen, como espejos, vidrios o incluso agua.