El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, celebró la victoria en las legislativas provinciales instando al presidente de la Nación, Javier Milei, a que «deje de insultar a la democracia, al federalismo y a la Constitución», y lo instó a tener «el coraje» de llamarlo para concertar una reunión entre ambos.
El búnker de Fuerza Patria fue una fiesta tras confirmarse que el peronismo le llevaba más de 13 puntos a La Libertad Avanza (LLA), y la celebración arrancó con un audio que envió la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien no pudo estar presente por su prisión domiciliaria.
«La gente le puso un límite a un presidente que no parece comprender que debe gobernar para todos, para los que lo votaron y para los que no lo hicieron también», dijo la exmandataria, y añadió: «El presidente tiene la responsabilidad de escuchar al pueblo de la provincia, que representa casi el 40 % del electorado nacional».
«Debería estar en este escenario», inició Kicillof su discurso en referencia a Cristina, y luego se focalizó en Milei.
«Las urnas le dijeron que no se puede frenar la obra pública, no se le puede pegar a los jubilados, no se puede abandonar a las personas con discapacidad», sostuvo, para enumerar además el desfinanciamiento en educación, salud, ciencia y cultura, y subrayar: «Las urnas le dijeron que tiene que dejar de insultar a la democracia, al federalismo y a la Constitución».
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Llamó a su gente a «no tomar el triunfo con soberbia» y cerró con una apelación directa al presidente: “Espero mañana el llamado, tené el coraje y la valentía para trabajar”.
Kicillof se erigió en el gran ganador de las elecciones bonaerenses: no solamente el peronismo mostró números inapelables, sino que además viene de una pulseada interna con La Cámpora. Y la militancia lo premió pidiendo “para Axel la conducción” y también la futura candidatura presidencial del peronismo.
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