Álvaro Arellano
María Soledad Aramendi atraviesa su segundo mandato al frente de la Sociedad Rural Argentina (SRA) de Rosario. Durante su gestión hizo sentir su voz con reclamos para defender al sector y no ocultó su posicionamiento político. Si bien en su momento reconoció su apoyo a Javier Milei, ahora sostiene: “No alcanza con ordenar la macro, porque hoy todavía el 60% de la producción se lo lleva el Estado nacional y no vuelve”.
Oriunda de Villa Cañás, provincia de Santa Fe, de una familia ganadera. Estudió arquitectura y en simultáneo se capacitó en temas relacionados al campo. “Me vinculé con la Sociedad Rural porque tenía una necesidad real de estar vinculada con pares de un núcleo productivo del país riquísimo”, aseguró.
En diálogo con Agro Hoy, evaluó la actualidad del sector, pasó factura al gobierno provincial y nacional sobre las deudas pendientes y respondió sobre una posible participación en la escena política. Su demanda más urgente tiene que ver con cuestiones centrales de la estructura política y por eso insistió con el tratamiento de ficha limpia. También renovó el pedido por una reforma tributaria y una rebaja gradual de retenciones hasta llegar a cero.
―¿Cuáles son las demandas de la Sociedad Rural y cuales vienen siendo las respuestas de la política?
―Las demandas son las de siempre, y soluciones, ninguna. Lo que se expresó en las urnas fue un cambio hacia un ajuste, hacia un Estado más chico. Todo cuesta demasiado porque aunque la sociedad votó eso, los actores de la política no quieren el cambio, sino perpetuarse. Tenemos que lograr un cambio en el que haya una mayor fortaleza gremial y mayor participación del sector privado y productivo dentro de la propia política.
―¿Qué actores cercanos al sector rural están motorizando los reclamos más urgentes?
―Todos demandamos a la Mesa de Enlace una mayor fortaleza y mayor posicionamiento ante el gobierno nacional. Tanto a nivel provincial como nacional pasa lo mismo, no basta con reunirse los actores de la Mesa de Enlace, sino que hay que sumar poder económico con las Bolsas de Comercio y las cadenas en conjunto del sector agroexportador. El campo es la mayor empresa a cielo abierto, incide en cada rincón del país. Seguimos sosteniendo el país, y no se están haciendo eco de las necesidades reales.
―¿Cuáles son los reclamos más urgentes que tiene Sociedad Rural Argentina?
―La propuesta es que haya decisión política. Específicamente las autovías 33, 11, 34, A012. Empezar a trabajar en esos proyectos. Otro tema clave es la seguridad, hoy se habla de proyectos de electrificación, pero cómo vamos a hablar de una cosa así si no nos queda un solo cable en el campo. Hay rutas que están liberadas y se roban hasta los equipos de siembra. Hay que garantizar la seguridad en esas zonas para lograr arraigo.
―¿Qué percepción tienen actualmente sobre la gestión de Milei, tras casi un año y sin novedades de quita de retenciones?
―Estábamos todos esperando al menos un gesto con la baja de retenciones pero vemos que eso no ocurre. Podemos entender que se quiera equilibrar la macroeconomía, pero necesitamos el cumplimiento de palabra y que miren la micro. Hoy no hay recursos para salir adelante, tenemos una gran presión impositiva. Esperemos que los legisladores también se hagan cargo, porque hasta ahora nadie presentó un proyecto para la rebaja de retenciones.
―¿Comparten la idea del gobierno de acomodar la macroeconomía para que tenga impacto en la micro? ¿O creen que el sector necesita medidas focalizadas?
―No alcanza con ordenar la macro, porque hoy todavía el 60% de la producción se lo lleva el Estado nacional y no vuelve. Se ve en la coparticipación, que no vuelve, en ese sentido el gobierno provincial debería actuar, por gestiones gubernamentales o vía judicial. Venimos de años de desfinanciamiento, con retenciones con extremos climáticos. Tenemos el ejemplo de Brasil, que era un país atrasado en términos de producción, y nos pasó por arriba en pocos años.
Es necesario el orden de la macroeconomía, pero la logística y energía son costos que cada vez inciden más. Hoy la rentabilidad está en índices negativos, más allá de que el clima está acompañando.
―¿Cuáles son los reclamos hacia la provincia en término de tributos o acompañamiento?
―Tenemos varias quejas respecto al presupuesto provincial. No vemos que se estén ocupando de obras prioritarias. Respecto al inmobiliario rural presentamos varios reclamos porque este 2024 tuvimos un 130% de aumento en un semestre más un 190% de aumento en el otro semestre y el gran propietario rural (más de 300Ha.) han tenido un 600% de aumento en este año. Pedimos la eliminación de esa figura y no se han hecho eco. Se habla de un aumento menor la primera parte del año, pero no alcanza, sigue siendo una caja recaudatoria que no vuelve en obras.
―¿Ves un futuro cercano involucrada en la política provincial o nacional?
―Mi camino es este, el de trabajar por la producción, veremos a donde conduce la vida. Entiendo que a veces no basta con lo gremial, hay que involucrarse a nivel político, la sociedad en su conjunto debe posicionarse y participar. Necesitamos gente comprometida e involucrada con el sector privado para hacer verdaderos cambios.